La historia de Los Robbins de La Ceiba, banda sesentera hondureña liderada por Guayo Cedeño, es muy particular. Aparecen en 1967, cuando la primera guitarra eléctrica llega a la provincia costera de La Ceiba en manos de Ricardo Pereyra, hecho que causa un estallido de emoción en el lugar. De inmediato Ricardo, junto con cinco amigos, decide formar un conjunto pero no cuentan con instrumentos para acompañar a la novedosa guitarra. Lo único que tienen a mano es una concertina (especie de acordeón pequeño) y un tambor de banda escolar. Con poco más que muchas ganas aparecería meses después Los Robbins, hasta hoy uno de los principales grupos de rock de Honduras y de Centro América.
Los Robbins tocaron "Mi soledad", 50 años antes que Coldplay
El sello español Electro Harmonix insiste en el rescate del sonido latinoamericano de los 60's y presenta en su nueva colección "La maravilla musical de Honduras" a Los Robbins de la Ceiba, el quinteto precursor del rock hondureño, que apareció de manera espontánea con influencias psychosurf, rocksteady y de composiciones clásicas centroamericanas y españolas. Son 10 temas del catálogo robbin, remasterizados y puestos a punto por Munster Records, con la guía del propio Guayo Cedeño.
Del LP "Ceibita en verano", el primer disco de "rock" grabado en Honduras
Vilma (Otto de Rojas' style), no incluida en el compilatorio de Electro Harmonix
Los Robbins de La Ceiba tocan hasta hoy sus temas clásicos, con casi su formación original, en auditorios plagados de nostálgicos de la nueva ola y de quienes nunca más escucharon algo mejor. Electro Harmonix prepara ahora el lanzamiento de un segundo rescate hondureño: Los Rockets.
"Tema de William", de Los Rockets, con imagen de Beatles
Una vez el sol brilló tanto que no pude más que acercarme a ti. Fuiste como el holograma de una muralla de agua: cubriste mi paso y me mojaste sin que en realidad ocurriera. Siempre me haces retroceder. Es tu poder sobre mí.One in a Googolplexes el proyecto del alemán Sebastian Zimmer, pequeñas historias de amor y desamor cubiertas de artesanía digital, para mantenerte atado pero distante. Es extraña, cinemática (y cinéfila), esa sensación de hacer distancia mientras estás más cerca.
Lilly.
One In A Googolplex.
Saarland, Alemania.
Single: Lilly / My sister's poems, 2011.
Foto: Alchemistrecords.com / MP3: Indierockcafe.
Es difícil convencerla de escribir, a pesar de lo bien que lo hace. Hasta que una mañana nos envió esta colaboración voluntariamente. Meses después de haberla envidiado a morir por Antonio Luque en concierto, Soy la Muchacha reporta desde Sevilla lo que ocurrió en el Southpop 2011, con bandas que suenan tan bien que hasta da ganas de echarse en el piso. Mi envidia no tiene nombre.
Por: Soy la Muchacha
Llego cinco minutos tarde y pienso que no importa, que en España no son puntuales, pero no. Mientras mi entrada es cambiada por un brazalete dorado escucho a Dënver tocar "Mi primer oro", el primer tema de Música, gramática, gimnasia. Corro hacia el interior y entre la oscuridad observo a Milton, delgadísimo y frágil, y Mariana, más guapa que en fotos y etérea. Me acerco lo más que puedo al escenario y dejo a mis pies moverse, por un momento dejo de pensar y contrastarlos con las ideas que había formado, están ahí frente a mí, talentosos y vivos, tocando como si no hubiera mañana o como si en el mañana ellos fueran los únicos sobrevivientes.
Al inicio el público me decepcionó, sólo éramos cuatro gatos los que bailábamos, los que vibrábamos, los demás veían el concierto y se quedaban de pie en medio de la oscuridad del teatro. Pero, luego, cuando tocaron Olas Gigantes y todos empezaron a bailar, después Litoral central todo fue fiesta y algo mejor. Resumen: cuarenta y dos minutos de éxtasis inesperado.
Hubo un descanso de más de veinte minutos que sirvió para comprar una cerveza y salir fuera del teatro a fumar (gracias a una ley que prohíbe fumar en lugares cerrados) y luego seguimos con Ellos. Tengo que confesar que yo fui ya cuando me tenían en su bolsillo y no tuvieron que hacer mucho para derretirme completamente, los conocí el año pasado, al llegar a España y su último disco Cardiopatía severa, se coló entre mis favoritos del año y se convirtió en un mantra para esos días de adaptarse a una nueva ciudad, un nuevo país, una nueva vida. Eso sí, Guille Mostaza me sorprendió: guapo, entregado y showman. Se comió el escenario y se relamió. Tocaron canciones del nuevo disco y de los anteriores, como "Diferentes", "Campeón" y una canción que no les conocía: "He vuelto", que me desarmó la última resistencia.
En el descanso entre estas actuaciones me encontré con Dënver, y aunque no supe de qué hablarles me acerqué, me sentí completamente groupie, pero valió la pena. Igual con la banda de Ellos, aunque los “famosos” de Guille y Santi, como la banda misma los llamó, se me escaparon.
22:00
Mercedes Audras subió al escenario armada de una guitarra y su voz que madura. Para mí fue un descubrimiento, la escuché sentada en las gradas del teatro, mientras descansaba de tanto salto y tanto grito. Lástima que estuviéramos pocos pero propició un concierto íntimo.
Luego, los chicos de Manel, ofrecieron un concierto impecable que demuestra por qué han sido número uno en ventas. Pensé que iban a generar más resistencia porque Sevilla suele ser una ciudad bastante tradicional y ellos cantan en catalán, pero fueron los que más fans atrajeron que no solo coreaban todas las canciones sino que les gritaban en catalán. Además, contaron historias, presentaron canciones y se metieron al resto del público al bolsillo. Hicieron saltar con su "Al mar" y dejaron uno de los mejores momentos de la noche. A diferencia de Ellos no mostraban más pretensiones que tocar y pasar un buen rato, armados con eso hicieron vibrar a todos. Oír para creer, desde esa noche Manel se mantiene intocable en mi altar personal.
Para cerrar el concierto La bien querida y su timidez insospechada. Si bien me gustan mucho varias de sus canciones se desluce en vivo, le falta energía y no se entregan. El sonido está lleno de interferencias y casi no mantiene contacto con el público. Sin embargo, David, el guitarrista, en las últimas canciones ganó en rock y en punk dando un cierre de concierto intenso al lanzar su guitarra al suelo.
Pensé estar escuchando en random canciones de Beatles, Dead Kennedys, Protones, The Cars y Pan Ron. Sentí que tenía delante a la hija de Estela Raval. Escuché con mayor cuidado. Temblé mientras bailé. Sudé pero sentí. Gran single promocional de la aclamada banda Dengue Fever, para su cuarto álbum, "Cannibal courtship", siempre con los hermanos Holtzman en guitarra y voz, y el impagable aporte de la camboyana Chhol Nimol como frontman. El rock fusión funciona como nunca.
Cement Slippers.
Dengue Fever.
Los Ángeles, Estados Unidos.
Álbum: Cannibal courtship, 2011.
Video: alaraco, en Youtube / Foto: ThirstyTongue.
Muchas veces he creído que despierto bajo el mar, allí donde estuvieron nuestros antepasados más remotos. De ojos saltones, branquias y piel acorazada. Con música que brota de valvas cerradas a distinta presión. Sabor a sal. Otras veces creo que despierto incluso en un mundo mejor, donde todos tienen lo que merecen. Tras varios años intentando, cuatro outsiders de San Francisco logran grabar un single para Daddy Pony y llevan fuera de su burbuja de amigos la música perfecta para la última temporada de Bob Esponja. Sonrío. Pese a todo, el mar es justo.
Pas Le Meme.
Carletta Sue Kay.
San Francisco, Estados Unidos.
Single: Pas le meme / Just another beautiful boy, 2011.
Video: Petermaxlawrence, en Youtube / Foto: Facebook.
Ok, como la mayoría de ustedes estoy harto de las guitarras surferitas de los comerciales del BCP. Pero jamás lo estaré de la explosión psicosurf de Los Protones. Nuevo single que formará parte de un próximo álbum de nombre "Hijas del diablo" (sin alusión a Keiko, ¿o si?) y que le da más argumentos al quinteto para seguir haciendo platos de fondo y no telonear a bandas monses en los bares de Lima.
Zángano.
Los Protones.
Lima, Perú.
Single: Zángano, con You don't love me (Vanesa Colmillo).
Foto: Difusión Los protones / MP3: Facebook.
Es hermoso cuando tus mejores amigos te dicen, muchos años después de conocerte, "nos queremos y seguimos siendo los mismos". Un soplo de sangre te inflama el corazón, corre como caballos entre tus venas, serpentea hasta tus ojos y, sólo porque llorar es para los débiles, contienes esa línea de lava que se derramas en tus ojos. Mis amigos de Low, aquellos que hace 20 años hicieron del slowcore un arma secreta para llorar en seco, vuelven a ser quienes siempren han sido en "C'mon", el noveno álbum de su carrera. Yo derramo, por fin, una lágrima por este abrazo de retorno.
Try To Sleep.
Low.
Minnesotta, Estados Unidos.
Álbum: C'mon, 2011.
Video: Subpop / Foto: Onethirtybpm.com
Una de las mejores canciones que he escuchado. 1993,"Words"
Haz bien lo que tengas que hacer, así te tome años. Y hazlo, así no haya nadie para disfrutarlo. Luego de 15 años de inactividad, la banda wave griega In Trance 95 vuelve a grabar con sus miembros originales, Alex Machairas y Nik Veliotis, en un estilo Depeche que ya ni Depeche Mode sigue. Si vas a hacerlo, hazlo bien, aunque el mundo haya cambiado. Siempre habrá alguien para ti. Siempre.
Wave (Are We Alone?)
In Trance 95.
Grecia / Isla de Man, Inglaterra.
Álbum: Abovearth, 2011.
Video: IT95 / Foto: MySpace.
Ritmos que sigues con el pie: el sonido de la lavadora, el goteo del caño, el ruido de la laptop cuando se reinicia. Ritmos que sigues con la cabeza: el martilleo del edificio en construcción, el reggaeton del taxista, la alarma del auto del miserable que no sale a apagarla. Ritmos que sigues con cualquier otra parte del cuerpo: por ejemplo el que sale de los ojos de esta señorita. Claire Boucher. Beat puro. Para otras discotecas. Grimes, desde Canadá.
Vanessa.
Grimes.
Vancouver, Canadá.
EP: Darkbloom, 2011.
Video: Arbutus Records en Vimeo / Foto: MySpace.
Hace dos años, apostamos un cajón de cerveza a que estos chicos de Brighton llegarían a la cima más pronto que tarde. Pues velos ahora, dado el primer paso con su firma en Elefant Records, con presupuesto para hacer videos y a punto de lanzar su tercer EP (el 18 de este mes). No todos soportan el twee pop, puede ser casi un insulto para las leyendas del rock ese seudogénero de sonidos hiperpegajosos y vocecitas chillonas, sin ningún otro compromiso que el de mostrar que las cosas son fáciles. Yo tampoco. Pero hay que reconocer que cuando se hace bien, te carga de buena vibra y te teletransporta a dimensiones en las que todo es ideal por minuto y medio. Foxes! aún no llega al estrellato, pero está en el camino. Me debes media caja.
The Panda Bear Song.
Foxes!
Brighton, Inglaterra.
EP: The panda bear song, 2011.
Video: ElefantRecords / Foto: Facebook.
¿Y qué tal si olvidamos todo y nos sumergimos en un mundo de dunlopillo, donde no te duele ni te repele lo que piensan los demás? Echo Lake es el colchón en donde caen mis esperanzas y donde las mismas se preparan para subir nuevamente porque así me ha acostumbrado la realidad. Shoegaze, Lush y Galaxie 500 desde Londres, lugar donde todo empieza de nuevo. Aquí también empieza de nuevo, carajo, una vez más.
Young Silence.
Echo Lake.
Londres, Inglaterra.
EP: Young silence, 2011.
Video: Dan Nixon, en Vimeo / Foto: IndieRockCafe.
Puedes discrepar conmigo en cualquier tema. Y mandarme a la mierda si te place. Pero jamás podrás quitarme el placer de escuchar a The High Llamas cuando todo está consumado. Enterarme de su nuevo disco es el único placer que me queda, seis horas antes de despertarme a ver cómo las profecías se cumplen y las plagas caen sobre este pequeño terreno que piso. Si es que realmente lo piso.
Winter's Day.
The High Llamas.
Londres, Inglaterra.
Álbum: Talahomi way, 2011.
Video: Fastfood, en Youtube / Foto: Highllamas.com
