Veinticuatro horas para hacerse hombres. Pasar de las armas a la altura. Quebrar cosas, ser veloces. Romper reglas. Esconder botines. Y sentir que al final del día llega la retirada obligatoria, impuesta por gente ajena que nada entendió y que nada entiende. Un manifiesto de Europa del Este, con la banda polaca
Pustki, la sencillez demoledora de su indie pop y uno de los videos más hermosos en lo que va de los dosmiles.
Lugola.
Pustki.
Warsaw, Polonia.
Álbum: Kalambury, 2010.
Video: SXSW, en Youtube / Foto: Facebook.
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